Informe: Marcas Tailandesas No Alcanzan Estándares De Sostenibilidad Básicos

Catorce marcas de atún enlatado del mercado tailandés evaluadas en un informe reciente no han logrado alcanzar los estándares básicos de sostenibilidad, trazabilidad y equidad, según Greenpeace.

La ONG encuestó a las 14 marcas como parte de la guía “Thailand Canned Tuna Ranking Report” y ha concluido que ninguna de las marcas cumple los estándares básicos establecidos para la producción de atún enlatado. Las marcas fueron evaluadas por su trazabilidad, sostenibilidad, legalidad, equidad, políticas de abastecimiento, transparencia y manejar cambios.

Tropical Canning Thailand (TBC) fue la que mejores resultados obtuvo, situada la primera en las categorías de sostenibilidad y trazabilidad, así como también proveyendo documentación importante que demuestra que no se abastece de atún de buques pesqueros Ilegales, No Declarados Y No Reglamentados (INDNR). La marca también tiene disponible una versión pública de su política de productos pesqueros en su página web, algo que les faltó a las otras marcas. A pesar de situarse en el número uno en el informe, su resultado fue solamente catalogado como ‘razonable’.

Greenpeace dijo: “A pesar de que la clasificación de TCB en el número uno puede ponerlo por delante de sus compañeros, está todavía lejos de tener un ‘buen’ ranking. En otras palabras, todavía queda mucho trabajo por hacer.”

En segundo lugar se encuentra Kings Kitchen, que también recibió una clasificación ‘justa’. Nautilus y Sea Crown se encontraron juntamente en tercer lugar, ambos haciéndolo “moderadamente bien en las categorías de trazabilidad general, sostenibilidad y legalidad.”

La marca Sealect, de Thai Union, logró alcanzar el cuarto lugar en el informe y según los registros controla el 43 por ciento del segmento nacional del atún enlatado de THB 700 millones. Comparte la cuarta posición con Ocean Wave.

Tesco-Lotus, Aro y Brook están en quinto, sexto y séptimo lugar respectivamente, mientras que Tops, también producida por Thai Union, se acercaba al final del ranking al ocupar la octava posición.

De las marcas encuestadas, cuatro no ofrecieron la información necesaria para un análisis preciso y automáticamente recibieron un suspenso. Estas fueron Ayam, Big C y Home Fresh Mart, todas marcas fabricadas por Thai Union, y Roza. Se clasificaron en este orden solamente en base a la información que las empresas ofrecieron al público en sus latas y en su página web.

Colocándolas en orden de “mejor a peor”, el informe descubrió que la mayoría de las marcas no tienen las medidas adecuadas para determinar los orígenes del atún, los tipos de método de pesca usados para capturarlos y el bienestar de los trabajadores.

Asuntos relacionados con el uso de esclavitud y de condiciones precarias de trabajo en el sector tailandés de productos marinos han estado atormentando a la industria durante los últimos meses, y han creado muchas preguntas sobre cómo mejorar la transparencia en la cadena de suministro. Hasta ahora, no ha habido alegaciones especiales que lo relacionen con el atún.

Uno de los activistas de Greenpeace del Sudeste de Asia, Anchalee Pipattanawattanakul, dijo: “Los consumidores tienen el derecho de saber qué hay en sus latas. Es vital para las compañías conserveras asegurar que su atún puede ser rastreable hasta dónde y cómo fue capturado, saber si está ligado a transbordos en el mar, a la pesca ilegal, a métodos de pesca destructivos o al trabajo forzado.”

Dijo que la mayoría de las marcas no consiguieron alcanzar los estándares básicos porque no podían identificar si, o exactamente en cuantas ocasiones, su atún había sido transbordado en el mar.

Con la fecha límite para que el país haga frente a su advertencia de tarjeta amarilla de la UE acercándose cada vez más, Tailandia ha estado implementando fuertes cambios durante los últimos seis meses para acabar con la pesca ilegal en el país y evitar una tarjeta roja que afectaría drásticamente su negocio internacional con Europa.